Ultima actualización Marzo 6th, 2025 2:10 PM
Los números primos, como ladrillos fundamentales de las matemáticas numéricas, han sido y siguen siendo buscados y estudiados desde la antiguedad.
Y es que, en lo elusivo y dificil de su búsqueda, se encuentra su belleza intrínsica… ya desde los tiempos griegos de Euclides a Eratóstenes, sus propiedades y enigmas han cautivado, a traves de generaciones, a una multittud de matemáticos y profanos que se han dedicado a buscarlos, catalogarlos y tratar de entender su esquiva naturaleza.
Para entrar en contexto, un número primo es aquel que puede ser divisible por si mismo y por uno sin dejar residuos, por ejemplo: dentro de los primeros 10 numeros tenemos al 2, 3, 5, 7 (y no… el 9 no es primo porque se puede dividir por 9, por 3 y por uno), y asi ad infinitum (al infinito y más allá.. si tal más allá existe en el ámbito matemático, o como diria un matemático…quizas si quizas no, todo pueder ser mientras no esté demostrado).
Durante mucho tiempo los números primos se consideraron una curiosidad (al igual que los números perfectos muy interrelacionados con los primos, que otro día en otra columna explayaremos en detalle), pero con la llegada del renacimiento, un armada de nuevos matemáticos puso en primer plano a estos maravillosos números, nombres como Fermat, Leibniz, Euler, Mersenne ampliaron las bases matemáticas (teoremas fundamentales del calculo I y II, comprensión del infinito, calculo diferencial e integral, teoría de números, de conjuntos, etc). y despues en el siglo XVIII (18) y XIX (19) de la mano de matemáticos como Legendre, Gauss y Riemann, se profundizó y caracterizó el significado y conocimiento de estos números.
Famosas (para quienes conocen algo de matemáticas) son las conjeturas (que significan supuestos) de Fermat y sobre todo la hipótesis de Riemann, en la cual se indica una fórmula única para poder encontrar cualquier número primo hasta el infinito, que aún no ha sido demostrada y que se ha llevado años y carreras matemáticas prometedoras por delante, de cientos de geniales matemáticos y entusiastas, en su demostración y que es parte de la lista de los 23 problemas de Hilbert, con un premio de 1 millón de dolares del Instituto Clay, para el primer mortal que logre demostrar que la teoría es cierta o que la derribe con un contraejemplo (un número que no cumpla tal condición).
Y es que la importancia de los números primos radica en que, cualquier número (sea positivo o negativo) puede ser creado a través de ellos, por tanto son las bases fudamentales para la existencia de todos los números conocidos (y por conocer) y la base de toda la matemática conocida.
Además, con el auge de internet y la criptografía (la ciencia que estudia el cifrado de datos por medios matemáticos) y el uso de claves para conectarse a internet, autentificarse, hacer pagos y transferencias bancarias, los números primos juegan un papel fundamental, ya que para obtener claves ajenas por medios informáticos, como el poder de procesamiento computacional (muchos equipos computacionales trabajando a la vez), el tiempo en descifrar dichas claves (a veces cientos o miles de años), hacen inútil cualquier intento serio de vulnerar dichas barreras y si así ocurriera, ya no tiene aplicación práctica por caducidad de la clave.
La búsqueda
Hoy en día, existen varias instituciones de renombre mundial, que buscan estos esquivos números y compiten por obtener el número primo más grande conocido, entre ellos esta Mersenne.org, institución que tiene actualmente el record de haber encontrado, hasta el momento, el número primo mas grande conocido, con un total de 24.862048 de cifras (más de 24 millones de digitos), con una notación matematica de 2p – 1, donde el factor es 82.589.933.
Y entre los cazadores de números primos, hay chilenos pero pocos y esto se debe principalmente al casi nulo apoyo que le han dado a la ciencias, los distintos gobiernos de Chile, de todo signo político durante años.
Entre los más destacados exponentes chilenos, que de manera altruista buscan estos números, tenemos al Ingeniero Mario Aguirre Figueroa, que presta parte del poder de procesamiento de los equipos de su empresa, para buscar estos números e investiga y aporta en distintos foros, sobre las maneras de aprovechar hardware viejo, obsoleto y tambien equipamiento actual, para que presten una función útil a la ciencia.
Y es que la búsqueda de las mayores números primos no es un búsqueda inútil, ya que al tener una mayor cantidad de datos de estos números quizas, podremos entender sus dinamicas matemáticas y aportar a la ciencia.
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